La melisa es un aceite con cualidades cítricas siendo refrescante, purificador, astringente y estimulantes del Qi, por lo que es indicado contra el estancamiento del Qi, el calor del hígado y el corazón, ayuda a mover, transformar, y eliminar las perturbaciones de la Mente (Shen).
Es dulce, es relajante, armonizadora y restaura el bazo-páncreas y calma el corazón.
Es buena para los trastornos de la cabeza y nervios, previene los desmayos, la melancolía, los trastornos hipocondríacos e histéricos, resiste la putrefacción y es útil en los padecimientos malignos y contagiosos, anima y alegra el corazón, cura las palpitaciones y fortalece todos los espíritus vitales, siendo buena para el desobstruir el cerebro, el hígado y el bazo.
Actúa sobre las emociones como un rejuvenecedor, ayudando a amortiguar los efectos negativos de nuestra mente y del mundo exterior. Alivianando la ira y apaciguando las obsesiones. Produce expansión y plenitud.
Se usa para: Alergias, Asma, Resfriados, Cólicos, Depresión, Disentería, Fiebres, Indigestión, Hipertensión, Problemas Menstruales, Migraña, Palpitaciones, Nauseas, Tensión Nerviosa, Esterilidad (Mujeres), Vértigo, Vómitos y fiebre (refrescante). Además se recomienda para la picadura de abeja y avispas. El aceite esencial en altas dosis es neurotóxico y teratógeno.
Uso principal en uñas y pies: es una magnifica solución antifúngica.
Piel: dependiendo de la mezcla de la fórmula, ayuda a la curación del acné y el eczema, y puede regenerar la piel madura. Este aceite esencial puede personalizarse en los tratamientos de piel grasa o seca.
CONTRAINDICACIONES: Ninguna conocida en dosis fisiológica. Desaconsejado en los tres (3) primeros meses de embarazo, y en lactancia en niños menores de dos años, evitar usarlo en piel hipersensible y en aquellos con hiperplasia prostática o glaucoma, no utilizar en concentración mayor a 1 %.